viernes, 21 de septiembre de 2012

El Cinta de Plata sigue vigente en la memoria colectiva

Alberto Horacio Elsinger
LA GACETA

CAMINANDO ENTRE LAS VÍAS

El tren de pasajeros más confortable del ex Ferrocarril Belgrano apareció en 1969 y se extinguió en 1992. Cubría Buenos Aires-Salta/Jujuy (vía Córdoba) en 36 horas. Era plateado y con una franja azul.



Dicen que los trenes son como la vida. Pero hay quienes piensan que la vida es como un tren: uno elige dónde subirse, pero debe pagar boleto. Está repleta de ascensos y descensos, salpicada de accidentes, de sorpresas agradables en algunos casos y de profundas tristezas en otros. El gran misterio es que no sabemos en qué estación descenderemos y, mucho menos, dónde bajará el que está sentado en el asiento de al lado. Y por último: el tren solo pasa una vez. La comparación, subjetiva por cierto, bien le cabe a la realidad ferroviaria argentina. Quizás porque los años transcurren y el tren no vuelve, sigue sin pasar. Solo lo vemos en nuestros recuerdos. Como este que hoy evocamos.

La imagen, publicada en La Gaceta, muestra un tren de trocha ancha en la estación Tucumán de la línea Mitre, no es el Cinta de plata.

Estaba pintado de color gris plateado con una guarda azul en los laterales. Era un tren expreso de trocha métrica. En cada parada una multitud heterogénea colmaba los andenes. Era un convoy repleto de soñadores con algunos escépticos camuflados. Un expreso de pasajeros que cubría en 36 horas de viaje el trayecto Buenos Aires-Salta/Jujuy con escalas técnicas en Rosario, Santa Fe; Córdoba y San Miguel de Tucumán. Le decían El Cinta de Plata. El mismo apodo con el cual los universitarios de fines del 60 y de la década del 70 al 80 identificaban al camión celda, jaula o celular de los "azules" policías tucumanos, en las manifestaciones o procedimientos.

Añorado

El tren más añorado y codiciado del otrora Ferrocarril Belgrano comenzó a correr a partir de 1969. "Fue implementado a través del plan de mediano plazo para Ferrocarriles Argentinos, que abarcó el período 1969-1973, cuando el ingeniero ferroviario y general de división Juan Carlos De Marchi ocupaba la presidencia del entonces ente administrador de los ferrocarriles nacionales", afirmó Víctor Hugo Rossi, abogado y consultor ferroviario (61 años).

Características

"El Cinta de Plata -añadió Rossi- era un convoy de pasajeros que tenía las características de un expreso de lujo. Los lunes, martes, jueves y sábados arribaba a las 21.05 a la ex estación Central Norte de El Bajo, procedente de Retiro. A las 21.40 partía rumbo al norte. En Güemes (Salta) la formación se dividía en dos. Una parte encaraba hacia San Salvador de Jujuy, con combinación a La Paz, Bolivia; y la otra marchaba hacia la capital salteña".

Siguiendo con el relato de Rossi, los lunes, miércoles, jueves y sábados a las 7.28 arribaba a la estación Tucumán N (la del Bajo) El Cinta de Plata que venía del norte y continuaba, vía Córdoba, hacia Buenos Aires. La partida se registraba a las 7.58.

Cambio de locomotora

Miguel Alberto Martínez, guarda jubilado de 83 años, contó que en la estación del Bajo, también llamada San Cristóbal del Bajo, no solo se aprovisionaba de agua a los coches del Cinta de Plata sino que también se los limpiaba y se cambiaba la locomotora. Además, se agregaban dos coches verdes del ferrocarril boliviano, con camarotes, para los pasajeros que iban a Bolivia.

Martínez vive con su familia en Villa 9 de Julio. Detalló: "multitud de familiares, amigos y allegados de los pasajeros concurrían a la estación para darles la bienvenida y para despedirlos. Por eso se juntaba mucha gente en el andén cada vez que el Cinta de Plata pasaba o venía del norte. Los bocinazos de la máquina se hacían oír a la distancia, en el último tramo de rieles en curva. Aparecía a paso lento la enorme locomotora que arrastraba una larga cola de vagones. Lejos del andén quedaba la máquina, de la cual descendía el personal de conducción enfundado en overoles verdes y con gorras de cuero. Ellos junto a los camareros, los guardas, los mozos y los inspectores nos entreverábamos con los viajeros".

Sensaciones dispares

"Todo era un desparramo de bultos, valijas, paquetes y gente que corría para tomar un taxi. Lo que más sobresalía eran las lágrimas para algún hijo que regresaba de 'la colimba' o era un estudiante que venía a pasar las fiestas de fin de año o un par de días con la familia", acotó Jorge Marcelo Benítez (72 años). Cada dos meses -por razones de trabajo- él solía viajar en este tren hacia Córdoba. Sus recuerdos se mantienen frescos.

Clase por clase

"Mozos de cordel atendían el coche comedor. Los comensales debían entregarles una tarjeta que identificaba el turno que les correspondía. En los coches-dormitorio predominaban los cadetes militares, las valijas de cuero y las mujeres de largos camisones y chinelas. En primera clase el equipaje bajaba de nivel y los paquetes con comida -milanesas, pollo al horno y frutas- asomaban en varios asientos. En cambio, en la segunda clase el olor a comida era una constante", detalló Benítez, memorioso ex viajante de comercio.

En segunda

"Todo se compartía en segunda clase -describió locuaz-: la gallina hervida, los sánguches de milanesas, los lampreados, los bocaditos o bombas de papa, choclo hervido, café y algún vinito bien camuflado en una bolsa de papel madera".

"En esta clase viajaban los que se atosigaban de tierra cuando el tren cruzaba Santiago del Estero y los que despachaban los bultos con sus nombres estampados en enormes rótulos. No se veían lujosos uniformes de cadetes pero sí abundaban los de soldados y marineros. También eran mayoría los estudiantes. Sin duda el de segunda era el boleto que más se ajustaban al bolsillo de todos ellos", evocó el ex ferroviario Néstor Saldaño.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/511740/tucumanos/cinta-plata-sigue-vigente-memoria-colectiva.html


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Apuntes de trocha métrica





- COMBINACIóN.- Los miércoles y viernes, el Cinta de Plata combinaba en San Salvador de Jujuy con el coche motor N° 2097, a la ciudad de La Paz, Bolivia. El servicio partía de la estación ubicada en una de las márgenes del río grande de la capital jujeña, a las 21.40.

- LOS COCHES VERDES.- Eran dos y habían sido cedidos por el ferrocarril boliviano. Se estacionaban en el andén 2 de la ex estación San Cristóbal de El Bajo. Se sumaban al tren con usuarios que iban hacia ese país (foto de abajo).

- POLÉMICA.- Hay quienes sostienen que el Cinta de Plata corría desde inicios de la década del 60. Y que las frecuencias eran diarias. De noche solía salir entre las 21 y las 22 desde Salta y desde Jujuy, respectivamente, hacia Retiro. Pero oficialmente está constado que nació en 1969. Los que aparecieron en los primeros años de los 60 fueron los coches pintados de plateado y azul.

- EL REVISTERO.- Era un personaje típico del tren. Aparecía por los pasillos como si cargara todo el quiosco sobre el estómago. No era uno solo; se iban renovando según la provincia que atravesaba el tren.

- EL CARRITO.- Otro accesorio muy esperado por los pasajeros era el carrito con bebidas, sandwiches y helados, que recorría la primera y segunda clase. A los niños se les antojaba todo lo que vendían.

- EL COCHE COMEDOR.- Las sobremesas se extendían en El Cinta de Plata. Las pastas, los bifes de chorizo, la sopa minestrón (de verdura) y los postres eran los platos requeridos por la mayoría de los comensales.


http://www.lagaceta.com.ar/nota/511739/tucumanos/apuntes-trocha-metrica.html


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Palito lo eligió para filmar una película


La imagen, publicada en La Gaceta, no corresponde al tren Cinta de plata, el cual circulaba con cochas con diferente esquema de pintura.


"Viajar en El Cinta de Plata era un placer. Pero también era un prestigio para los tucumanos. En el interior de ese tren Palito Ortega filmó parte de su exitosa película de 1974 'Muchacho que vas cantando'", destacó Víctor Hugo Rossi.

"Numerosas escenas se rodaron en la estación Central Norte de El Bajo y otras tantas se filmaron en la terminal Retiro del ex Belgrano. La gente acudía en forma masiva a la estación para ver de cerca al entonces cantautor popular, que después devino gobernador de la provincia. Claro está que no todos pudieron acercarse, aunque hubo numerosos privilegiados que participaron como extras", evocó Rossi, un apasionado del tema ferroviario Juan Manuel Leguizamón, otrora boxeador aficionado, contó: "en ese filme de Ortega también actuó otro tucumano, que un buen día viajó en el Cinta de Plata para radicarse en Buenos Aires. Era Oscar "Pelusa" Muñoz, ex campeón de los welter juniors. Él fue extra en la película, con un breve papel como changarín. Así conoció a Palito, con el cual después trabajó al radicarse en la Capital Federal".

Leguizamón, que al igual que Rossi es un apasionado del fútbol, recordó: "en El Bajo, cuando la estación se llamaba Central Norte, se fundó en una de sus oficinas el club homónimo. Era el 11 de noviembre de 1921. La primera cancha de 'los cuervos', apelativo con el que se conoce al club ferroviario, estaba en la zona del ex aeropuerto. En 1951 se trasladaron a Thames y Santa Fe, del barrio El Bosque, donde hoy está la cancha".

"...Han transcurrido años y sigo visitando la misma estación de tren. Pero hoy quiero hacerlo por última vez. Veo gente que viene y que va. Percibo el ruido de un tren. Escucho murmullos, llantos y risas. Mi corazón late tenue. Estoy partiendo. Hace casi 20 años que la palabra mañana erradiqué de mi léxico. Como el tren...como yo". ("El último tren", cuento de autor anónimo).

http://www.lagaceta.com.ar/nota/511741/cultura/palito-lo-eligio-para-filmar-pelicula.html


jueves, 13 de septiembre de 2012

Los Pueblos de Salta: Hickman



Jueves, 13/09/2012 | 11:33 hs

POR ROSARIO TORINO SOLÁ

Hickman, un pequeño poblado en un extenso departamento salteño.



Viajando 71 kilómetros por el Chaco Salteño al este de la ciudad de Embarcación, en el gran departamento General José de San Martín y a más de 770 metros de altura sobre el nivel del mar; se encuentra la localidad de Hickman. Este pequeño poblado, que con su nombre recuerda a un ingeniero del ferrocarril, dista de 270 kilómetros de distancia de la cuidad de Salta y se halla ubicada sobre la Ruta Nacional número 81.

Entre las vías del Ferrocarril Belgrano, que une a Embarcación con la provincia de Formosa, y dicha Ruta Nacional; Hickman se levanta, con sus más de 700 habitantes, como un sitio muy tranquilo y sereno que se caracteriza por su humildad y sencillez. Criollos y familias aborígenes wichis de las comunidades misioneras de La Paloma, El Medio y La Golondrina, integran la pequeña comunidad de Hickman.

Esta etnia indígena, que fue apodada peyorativamente de "matacos" por los invasores quechuas, habita principalmente en el este del Departamento de Tarija, en Bolivia y en el Chaco salteño. Los wichis se caracterizan por rasgos culturales característicos, como la monogamia, el sedentarismo, la posesión de territorios por parte de familias y una supervivencia a la vieja escuela, a través de la recolección, caza y pesca. Y, en cambio, por otro lado los habitantes criollos, mucho más organizados, trabajan y viven de la producción ganadera y la explotación forestal.

A pesar de tratarse de un pequeño poblado muy modesto y discreto, en Hickman todos los niños tienen la posibilidad de recibir educación. La Escuelita, que con su nombre rinde homenaje a un militar y político argentina, que varias veces gobernador de la provincia de Entre Ríos; “Justo José de Urquiza” brinda formación inicial a los pequeños de la localidad. Y también, para los más grandes existe la opción de capacitarse en las tareas típicas de su pueblo, a través de un bachillerato regional con orientación a la producción.

Nuestra Señora de la Merced es la santa patrona de este pueblo, y durante el mes de septiembre este le rinde homenaje en una fiesta llena de actividades y alegría. Un tradicional almuerzo criollo, con espectáculo de folclore y el juego del bingo; son actividades que se suman a la celebración religiosa y que sirven para unir a todo el municipio de Embarcación en Hickman. Y la procesión de la virgencita de la merced, acompañada de un desfile cívico con la participación de miembros de la fuerza de seguridad y de distintas agrupaciones gauchas; concluyen con la fiesta patronal.

Durante el año 2009 Hickman fue noticia. Las enormes diferencias de la compañía Tecpetrol (UTE Aguarague), que buscaba explorar y explotar nuevas áreas hidrocarburíferas, y las comunidades wichis, que luchaba por sus derechos; no tardaron en salir y dar que hablar en distintos medios. Este tipo de conflicto es muy común en esta región salteña, donde una empresa llega y se instala en una zona, para aprovechar sus recursos, que esta a su vez se encuentra ya habitada por los pueblos originarios que rechazan estos avances y sólo desean cuidar cada ser vivo de su tierra natal.

http://www.elintransigente.com/notas/2012/9/13/pueblos-salta-hickman-146156.asp

lunes, 3 de septiembre de 2012

Los Pueblos de Salta: Fortín de Dragones



Lunes, 03/09/2012 | 11:29 hs

POR ROSARIO TORINO SOLÁ

Fortín de Dragones, una tierra con mucha potencia, pero grandes problemas también.



Viajando por la Ruta Nacional número 81, en el kilometro 1798, se llega a la localidad de Fortín de Dragones, que se halla en el extenso departamento General José de San Martín. A más de 700 metros sobre el nivel del mar se levanta este poblado que depende de la Municipalidad de Embarcación y que cuenta con 2000 kilómetros cuadrados de superficie.

En la subregión chaco seco del gran Chaco Americano, Fortín de Dragones se descubre como un sitio muy rico en recursos y posibilidades, pero con grandes problemas también. Y es la deforestación en exceso una de las cuestiones que más polémica y controversias genera entre su propios pobladores. Y es que alrededor de la Ruta Nacional 81, donde antes había monte y frondosa vegetación, hoy de eso ya no queda absolutamente nada. Aquellos magníficos árboles no dejaron ni una hoja, y aquel monte, ha desaparecido totalmente.

Poblada, desde tiempos milenarios, en su mayoría por familias que descienden de diversos pueblos originarios y por campesinos criollos, que lo hacen desde hace más de cien años; la localidad de Dragones ya cuenta con más de 2000 habitantes. Estos últimos por lo general se dedican a las tareas agrícolas, sobre todo a la cría de ganadería. Pero son los nativos los que más conflictos atraviesan en sus propias tierras, y se trata por sobre todo de enormes diferencias que surgen con las grandes empresas que se acercan hasta allí para aprovechar sus recursos.

Ya sea por el desmonte exagerado, que viene acompañado de alambrado y cultivos, o por el desplazo de sus tierras que estas familias sufren sin consuelo; es que la situación en Dragones es caótica para los pueblos originarios. Muchas familias oriundas de esta tierra no tienen voz para reclamar y la están pasando realmente mal. Y a pesar de hay realidades que son inevitables si debería haber mas conciencia sobre estos individuos y sobre la rica diversidad del bosque chaqueño que se esta perdiendo.

Y es que Dragones, en el Chaco salteño es uno más de esos lugares opulentos en recursos naturales y biodiversidad genética; su madera, sus animales silvestres y su agua pura que surge del rio Bermejo; son bienes muy importantes que se deberían cuidar mejor. No olvidemos que el monte es la vida de estos autóctonos, así que se debería defender óptimamente.

Tierra rica con cauces subterráneos y vertientes de agua dulce, de montes poblados de ganados vacunos, caprinos, ovinos, porcinos y caballares; es el suelo de Fortín de Dragones. Habitado por hijos e hijas del chaco salteño, tanto por sus originarios como sus criollos, este pueblo no se puede olvidar y no se debe pensar en él solo como en un recurso para matar y utilizar, pues es el hogar de muchas y diversas formas de vida.

http://www.elintransigente.com/notas/2012/9/3/pueblos-salta-fortin-dragones-145046.asp