lunes, 7 de julio de 2014

Los trenes siguen pasando por Ranchillos, pero ya no paran en la estación

Lunes 07 de Julio 2014.

Alberto Horacio Elsinger
LA GACETA
aelsinger@lagaceta.com.ar

El primer tren de trocha ancha llegó a Tucumán el 6 de febrero de 1891. La estación Ranchillos se construyó en 1888 pero se habilitó más de dos años después. Si bien es cierto la empresa propietaria de la linea que cubre Retiro (Buenos Aires) - Tucumán era de capitales ingleses, fue construida por personal técnico español. Adquirida por el Central Argentino, al nacionalizarse pasó al Mitre.

SIN TRENES. La estación de Ranchillos, parada obligada de grandes formaciones en otros tiempos, hoy está cerrada y ya no luce el esplendor de antaño. Se encuentra habitada sólo por la nostalgia y el recuerdo de los vecinos. LA GACETA / FOTOS DE OSVALDO RIPOLL.


El gris del día se asemeja al gris del alma. Es que Ranchillos es sinónimo de nostalgia en esta mañana de julio. El vetusto reloj ubicado en la parte central, debajo del techo del andén de la estación, sólo es una esfera blanca con números romanos. Sin agujas ni vidrio protector, hoy es un huérfano de utilidad, de latidos y de existencia.

El reloj nació junto con el edificio, en 1888. Pero fue deteriorándose con la ilusión de quienes ya dejaron de creer, que a pesar de que el tendido de la linea que llega a hasta Retiro (ex Mitre Buenos Aires) aún brinda servicios de pasajeros, ya no recuperará el esplendor de sus años dorados. Saben que la estirpe ferroviaria ranchilleña no volverá a ser como en los tiempos de gloria del Estrella del Norte, la formación más popular del otrora Ferrocarril Central Argentino, después transformado en Bartolomé Mitre. Tampoco se deleitarán con El Aconquija, El Expreso Buenos Aires-Tucumán, El Mixto o El Cordobés. Trenes de lujo y confort, los primeros; de comodidad, rapidez y bajos precios los dos últimos. No obstante dignificaron y enorgullecieron el transporte de pasajeros sobre trocha ancha hasta el fatídico 1993 del presidente Carlos Menem, cuando se decidió levantarlos.

Perturbación

“El tren provoca las mismas coincidencias perturbadoras que las ciudades del mundo infinito”, pregona Emilio Ledezma, a los 78 años. El hombre, jubilado ferroviario y ex jefe de estación de Ranchillos, reside a pocos metros de una de las paradas del ferrocarril que se inauguró oficialmente en esta provincia el 6 de febrero de 1891. Según Ledezma los viajeros siempre hablan, cuentan sus vidas y hasta puede surgir el amor cuando viajan en tren. “Pero la cercanía de los extraños de alguna manera oculta un secreto”, reflexiona.

“El tren es confortable, amigable, aventurero y seductor. Uno se vuelve hasta poeta cuando habla de ellos”, agrega, entre jocoso y melancólico.

HUÉRFANO. El otrora infalible reloj, perdió su vidrio y sus agujas.


“El Mixto paraba en todas las estaciones de la linea. Demoraba un día en llegar a Buenos Aires. Era el tren más popular de un ferrocarril que se caracterizaba por el lujo, el confort y la calidad de sus servicios”, describe sin ocultar su entusiasmo, Juan Carlos Pereyra, de 65 años, otrora ex jugador de San Antonio de Ranchillos, y ex ferroviario.

El rectángulo del predio ferroviario es como un oasis talado de árboles. Aunque estos abundan en los contornos del perímetro delimitado por las avenidas Solano Peña, al oeste -donde en otras épocas la estructura del ingenio San Antonio difícilmente pasaría inadvertida- y San Martín, hacia el este. Hoy sólo dos raíles se mantienen en uso, pero sin aseo en la playa de maniobras. Parte de la tercera vía sólo se observa una vez atravesado los pasos a niveles de Durso hacia el norte, y de los Domínguez, hacia el sur como los definieron los lugareños- , porque hasta el día de hoy aún carecen de nombre. El resto de la vía fue levantado, depredado o desaparecido. Y de las otras no dejaron vestigios.

Realidad y anécdota

El depósito se mantiene en pie con las letras grandes y nítidas de la palabra Ranchillos, pintada sobre las paredes frontales, en la parte superior simétricas al vértice del techo de dos aguas. De las señales sólo dejaron las columnas que la sostenía y de los cambios de vía cuatro palancas sin el cable de cobre que las conectaba a los rieles.

EL PUEBLO. Frente a la estación un cartel da la bienvenida a los viajeros.


“Sobre estos largos andenes se reunía una multitud cada vez que paraban El Cordobés y El Mixto. Acá la gente vendía caña de azúcar. Era el producto vedette de esta parada”, evoca Raymundo Valdés, de 76 años, titular del Centro de Jubilados El “Progreso“ que usufructúa el edifico de viajeros. Los bancos de la sala de espera se encuentran en la parte opuesta, hacia la San Martín y una de las boleterías se convirtió en consultorio.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/598304/sociedad/trenes-siguen-pasando-ranchillos-pero-ya-no-paran-estacion.html


La parada nació en 1888 y se usó en 1891

El edificio de viajeros se localiza al frente del ex ingenio San Antonio.



El 6 de febrero de 1891 pasó por la estación Ranchillos, que originariamente se denominó Los Sosa, el primer tren de trocha angosta. En setiembre de 1890 se había habilitado al servicio el tramo Pintos-La Banda, en Santiago del Estero, pero el tendido de las vías y la construcción de edificios de viajeros del tramo La Banda-San Miguel de Tucumán ya se había iniciado en 1886.

El Ferrocarril Buenos Aires-Rosario, de propiedad de una sociedad anónima, fue el que inició la construcción de la trocha ancha Buenos Aires-Tucumán, en 1874. Las habilitaciones al servicio se realizaron entre 1876 y 1886. Primero concluyeron el tramo Retiro-Campana (18 abril de 1876); luego se agregaron los tramos Campana-Zárate (30/4/1884), Zárate-Baradero (20/4/1885) y Baradero-Rosario Norte (26 de enero de 1886). Después se prolongó desde Rosario a Sunchales.

El 28/10/1886 se abrió de Rosario a Gálvez, pero se lo usó en noviembre de ese año. Luego habilitaron los segmentos Gálvez-Rafaela (11/3/1887), Rafaela-Sunchales (14/6/1887), Sunchales-Pinto (Santiago del Estero, 21/2/1888), Pinto-La Banda (16/9/1890) y, más de cuatro meses y medio después, La Banda-San Miguel de Tucumán.

CAPITALES INGLESES.- El Ferrocarril Buenos Aires a Rosario FCBAR fue una compañía de capitales británicos. Cuando se fundó, en abril de 1874, se denominaba Compañía del Ferrocarril de Campana. Pero a partir de 1885 se convirtió en FCBAR. En 1908 se fusionó con el Ferrocarril Central Argentino.

SIN AGUA.- La bomba de agua, la manga y el receptáculo para suministra el líquido vital a las locomotoras se cayó o fue derrumbado y se oxida en el lugar donde funcionaba.

PERSONAL.- Nueve personas trabajaban en la estación en las épocas que el ferrocarril era un transporte primordial. En Ranchillos se cargaba y descargaba caña de azúcar, pero también se trabajaba con fletes de frutas y hortalizas y ganado, en menor escala, según contó el jefe de estación Emilio Ledezma, que trabajó desde setiembre de 1970 hasta 1991.

UNO DE LOS PRIMEROS.- El Cordobés partía desde la estación Sunchales y en Forres (Santiago del Estero) encaraba a Córdoba, pasando por Arrufo (Santa Fe). Fue de los primeros trenes de pasajeros del Mitre que dejó de Circular.

SIN MESA GIRATORIA.- “En Ranchillos nunca hubo mesa giratoria. Donde sí había -y creo que sigue existiendo- es en Cevil Pozo, que ahora parece que la van a convertir en estación de carga y de pasajeros. El beneficio social del tren era importantísimo. Aún no entiendo por qué lo levantaron”, dice Néstor Carlos Mansilla, de 78 años, ex capataz de cuadrilla de la estación.

ESPAÑOLES.- “Tanto la construcción del terraplén, el tendido de los raíles como las obras de diseño y edificación de las estaciones fueron realizadas por personal técnico de orígen español. A ellos les atribuyen que esta localidad se denominara Ranchillos, porque se admiraban del gran números de ranchos que había en torno a la estación que se estaba construyendo”, detalló Ramón Jiménez, de 68 años.

RANCHILLOS.- La comuna de Ranchillos se encuentra a 24 kilómetros al sureste de la capital tucumana, por la ruta Provincial 301. Pero por la nueva traza que desemboca en la 9 redujó la distancia a 7 kilómetros.

DOS VERSIONES.- Según la profesora Hilda Elena Zerda de Cainzo, Rancheemos es una población originada por la presencia del ingenio San Antonio, que fue fundado alrededor de 1907 por el empresario italiano Antonio Capurro. No obstante ello en 1891 ya existía la estación de ferrocarril Ranchillos, por lo que la población se originó por la presencia de este medio de transporte, que a su vez imprimió un avance arrollador a esta actividad industrial.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/598307/sociedad/parada-nacio-1888-se-uso-1891.html